Visitando la Ampliación del Canal de Panamá

Como ya les comenté aquí, la idea principal de espacio o blog es compartir ideas y fomentar en otros que se identifican con mi historia, la decisión de llevar un estilo de vida saludable. Sin embargo también me gustaría compartir algunas vivencias, que considere relevante o, como en este caso de mi entrada de hoy, una experiencia irrepetible «Visitando la Ampliación del Canal de Panamá».

Esta experiencia en particular fue irrepetible porque en efecto así es, tal cual. Sucede que el pasado 17 de mayo de 2015, todos los panameños y no panameños, fuimos invitados a conocer el área donde se realizan los trabajos de la Ampliación del Canal de Panamá. El punto específico, las nuevas esclusas del Pacífico en Cocolí.

El trabajo por parte de los organizadores fue muy bueno, y miles de personas entre panameños y no panameños, tuvimos la oportunidad de vivir esta experiencia magnífica e irrepetible. Desde la llegada en auto y la fila para entrar y tomar el tour, todo fue una locura, pero bien valió la espera.

Cuando nos bajamos del bus en la primera parada del tour y te encontrabas en medio de esta tina gigante la sensación fue simplemente indescriptible; un poco de sorpresa, asombro, alegría, respeto, orgullo y pequeñez (literalmente hablando). En el ambiente escuchábamos música de artistas panameños, veíamos banderas de Panamá por todos lados y se percibía la emoción de todos los que allí pudimos disfrutar de esa oportunidad única.

Cuando terminamos de recorrer dentro de la esclusa el área designada para la visita y luego de tomarnos todas las fotos que quisimos, el bus nos trasladó a la siguiente parada; un punto desde donde se podía apreciar una vista de la Ampliación del Canal de Panamá que no será posible volver a observar, a menos que sea desde uno de los enormes barcos que viajarán por las nuevas esclusas, ya que el terreno donde estábamos pisando será removido para dar paso a los barcos que transitarán por las nuevas esclusas del Pacífico.

La  primera foto (arriba) es una imagen de mi esposo y yo pisando el fondo de la gigante tina, hoy día ya este punto está cubierto de agua ya que la obra está en una etapa en la que han vertido agua a las nuevas esclusas para hacer pruebas.

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En esta fotito aparecemos en el fondo de las nuevas esclusas del Pacífico en Cocolí y al fondo se puede observar una de las enormes compuertas rodantes. Solamente con imaginar que se utilizaron 2.4 millones de metros cúbicos de concreto para construir esta esclusa del Pacífico, nos hace realizar el tamaño de esta obra.

Realmente puedo volver a decir que la experiencia valió la pena. Fue un día inolvidable en el que además de aprender y estar en vivo y a todo color desde el lugar de los hechos, pude experimentar una vez más el orgullo de ser panameña y agradecer a Dios por permitirme nacer en esta bella tierra.

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Nos vemos pronto aquí.

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